En las islas británicas se sentaron las bases para crear las competiciones de clubes (ligas y copas) que integraban los equipos que iban surgiendo. Un formato que los dirigentes franceses trasladaron a un torneo que integrara a los mejores jugadores de cada país, surgía así la copa de naciones impulsada por el abogado Jules Rimet en 1928 quien anteriormente había fundado un club de fútbol, el Red Star, y había sido uno de los padres de la primera liga francesa.
Una competición que fue un éxito desde sus inicios y que conllevo que Henri Delaunay, brazo derecho de Rimet y secretario de la FIFA, creara la UEFA con motivo del mundial de Suiza 54. Un organismo que contó en sus inicios contó con 33 selecciones y cuyo primer presidente fue Ebbe Schwartz.
Instaurada la UEFA, un año después, el 2 de marzo de 1955, se celebró la primera reunión para crear la copa de naciones europeas (Eurocopa) donde Delaunay presentó el borrador del torneo. Un campeonato que buscaba emular a la Copa Sudamericana, actual Copa América, que ya se estaba jugando al otro lado del charco.
Dicha competición tenia como principal problema para ser una realidad la falta de fechas disponibles debido a la gran cantidad de campeonatos de clubes. Además, la muerte de Delaunay en plena gestación de la Eurocopa aumentó las dudas de que este torneo viese la luz.
A pesar de las dificultades, el hijo de Henri Delauney, Pierre, continuó el trabajo iniciado por su padre con el apoyo del presidente de la UEFA (Ebbe Schwartz) y miembros de este organismo como Gustav Sebes, Constantin Constantaras, o el español Agustín Pujol entre otros. De esta forma, se acordó la creación de un campeonato europeo de naciones que, por falta de fechas, se iniciaba este torneo con un formato de eliminatorias de ida y vuelta aplazando para el futuro una competición con una fase de grupos inicial.
A pesar de que la idea salió adelante, hubo selecciones en contra y a favor de su creación. Un grupo de adeptos formado por 15 selecciones entre las que estaban Alemania Oriental, los países de Europa del este, Portugal o España (que voto que si su presidente Alfonso Lafuente haciendo caso omiso a la negativa del gobierno español)-. En contra otras 16 selecciones lideradas por los países escandinavos (Inglaterra, las dos Irlandas, Suecia, Bulgaria y Escocia se abstuvieron) Alemania Federal o Francia e Italia.
Sin embargo, posteriormente en una nueva reunión en Bruselas, Bulgaria y la República de Irlanda fueron partidarios del sí permitiendo que la Copa de Europa de Naciones o “Copa Delaunay” (nombre que se le dio en honor a su impulsor) viera por fin a la luz.
Así las cosas, en 1958 se celebró en el hotel Floresta de Estocolmo el sorteo de la primera Eurocopa (que comenzó en octavos de final) y que se disputaría en 1960 en Francia; el sueño de Henri Delaunay era al fin una realidad.
La Copa Delaunay