Diego Pablo Simeone. El entrenador argentino es uno de los mejores entrenadores que existen actualmente en el planeta fútbol y uno de los que mejor saben congeniar con sus jugadores para sacar el mayor rendimiento posible de los mismos a través de una comunión especial entre técnico y futbolistas.
En este sentido, este vínculo ha podido verse recientemente en pesos de la plantilla del Atlético de Madrid como es el caso de Antoine Griezmann o Jan Oblak. Hombres que anunciaron este verano que se quedaban en el equipo debido a que el club rojiblanco no podrá fichar hasta enero por la sanción de la FIFA y que muestran el grado de compromiso tanto con la institución como con el entrenador.
Una unión con el técnico que, por ejemplo, Antoine Griezmann ha mostrado en diversas ocasiones como antes de la última renovación del Cholo cuando manifestó “Me encanta trabajar con él y si sigo en el Atlético es porque quiero seguir trabajando con él y con el equipo ”. Una situación que también expresaron de una u otra manera jugadores como Koke, Fernando Torres o Filipe Luis quien llegó a afirmar en una entrevista “me conoce mejor Simeone que mi padre ”.
Precisamente, el caso de Filipe Luis fue el primer jugador que cubrió el trayecto Atlético-Chelsea- Atlético ya que tras no triunfar en el conjunto londinense decidió regreso al abrigo de Simeone en Madrid. Una situación y un trayecto que ha completado recientemente el hispano brasileño Diego Costa.
Así las cosas, el jugador de Lagarto fue anunciado el pasado 26 de septiembre como nuevo jugador del Atlético de Madrid en el que será el traspaso más caro de su historia tras pagar los rojiblancos 55 millones de euros (más 10 en variables) por su regreso tres temporadas después de su marcha.
La vuelta de Diego Costa al equipo rojiblanco ha sido uno de los rumores del verano aunque como el club madrileño no puede incorporar jugadores hasta el próximo enero esta incorporación se ha consumado tras la conclusión del mercado estival.
Además, dicho regreso supone el retorno de un jugador “made in Simeone” por cuya vuelta llevaba suspirando el entrenador argentino varias campañas. Una petición del técnico que este verano era también un deseo del hispano brasileño por volver tras no contar para su anterior entrenador, Antonio Conte.
De esta forma, a partir el próximo mes de enero Costa podrá jugar con sus compañeros al igual que Vitolo que finalizará su cesión “obligatoria” en la UD Las Palmas. Dos jugadores que aumentaran el potencial del equipo para competir con los grandes de España y Europa.
Por lo tanto, con el regreso de Diego Costa se consuma la vuelta de un guerrero “made in Simeone”, un jugador que fue su referente goleador en la Liga ganada temporadas atrás, un futbolista que encarna a la perfección los valores del argentino basados en la garra, el compromiso y la intensidad.
En definitiva, el Atlético reincorpora a un guerrero indio que encarna el valor, en símil futbolístico, de los Toro Sentado, Jerónimo u Caballo Loco, cualidades que poseía en el campo y que ha trasmitido desde el banquillo Diego Pablo Simeone.