No ha habido suerte con España en el sorteo para el mundial 2014 que se celebrará en Brasil. El combinado que dirige Vicente del Bosque ha quedado encuadrado en él, a priori, peor grupo posible. El conjunto nacional ha quedado encasillado en el grupo B junto a Holanda, Chile y Australia.
Dentro del grupo, la roja debutará ante Holanda, dándose con ello la repetición de la final del pasado mundial en el tercer partido del torneo de selecciones más importante del mundo. Un combinado holandés que no se parece mucho al que nos encontramos en dicha final ya que tras su traspiés en la pasada Eurocopa de 2012 en Polonia y Ucrania donde no paso de la fase de grupos provocó el cese del seleccionador Bert van Marwijk a quien sustituyo el también “tulipán” Louis Van Gaal que llevo la revolución al combinado orange. Actualmente el conjunto holandés es una mezcla de juventud y veteranía no exenta de calidad.
Sin embargo, estos elementos no están bien compensados ya que la experiencia que dan los años de futbol se concentran en las posiciones ofensivas que mezclan juego combinativo con contragolpes rápidos representados en hombres como Robben, Van Persie o Sneijder. Ese es su punto fuerte que les ha permitido alcanzar la clasificación con un buen número de goles pero que contrarresta su punto débil que está en una defensa joven con hombres como Classie, Van Vrij o D. Janmaat que representan el futuro pero aún están en fase de formación.
A pesar de ello, Holanda no es la selección que más preocupa al combinado que dirige Vicente del bosque ya que el rival que el seleccionador de origen salmantino quería evitar era la selección sudamericana de Chile. Posiblemente, la selección más poderosa actualmente en el continente americano. A pesar de que ya no están dirigidos por Claudio Borghi sino por Jorge Luis Sampaoli sigue siendo un equipo al que le gusta tener un buen rato de valor basado en el juego asociativo y en un continuo asedio e intensidad en su juego tanto cuando tienen el esférico como cuando no.
Su estrella es el juventino Arturo Vidal, el ocho de la selección es el auténtico pulmón y hombre de referencia del equipo. Él es el que hace de enganche entre la defensa y el ataque convirtiéndose en un auténtico pulmón así como un salvavidas para el resto de su compañero algo que hace tanto la selección común su equipo donde su trabajo incansable durante los 90 minutos le han llevado a ser considerado como uno de los 10 mejores jugadores del mundo actualmente. Junto a él el equipo chileno suele jugar con una defensa sólida que acompaña hombres al ataque como Mauricio Isla, un medio campo poderoso con hombres como el propio Vidal, Valdivia así como Gary Medel, encargado de la recuperación del balón, y con jugadores en la punta de ataque rápidos e incisivos como Alexis Sánchez o Vargas. Mucha calidad para un equipo que no para de crecer y al que la selección española ya se ha enfrentado en multitud de ocasiones y al que cada vez más le cuesta derrotar hasta tal punto de que era
El grupo lo cierra un combinado australiano que a pesar de que en la confederación de Oceanía se ha clasificado con holgura es el rival más débil del grupo y, con semejantes compañeros de viaje, sus opciones de clasificación son prácticamente nulas por lo que su intención será disfrutar de su presencia Brasil y a partir de ese punto todo lo que sea positivo será bienvenido. Jugadores como Tim Cahill o Jedinak ponen en evidencia que los tiempos de gloria del país australianos con figuras como Viduka o Kewell son tiempos del pasado.
En definitiva, mucho nivel y mucha calidad en las tres principales selecciones que aspiran a meterse los octavos de final donde los partidos dejarán indiferente a nadie y el billete para la fase del KO estará más caro que nunca y donde lo que nunca faltará será la emoción.