Cristiano y el balón, ¿de oro?

Cuando en muchos de los reportajes que salen tanto en prensa, radio o televisión acerca de las grandes estrellas del mundo del fútbol de hoy y de siempre desarrollan el tema de la infancia del jugador, todos los entrevistados en el mismo suelen destacar que siempre que podía se escapaba a jugar con el balón y que este era su amigo más fiel.

Uno de estos casos era el de Cristiano Ronaldo. Prueba de ello es que está su madre Dolores Aveiro ha manifestado más de una ocasión que su hijo estaba todo el día jugando al fútbol y que se escapaba o no hacia los deberes por practicar su afición. Un amor por la pelota que se le metió muy dentro al igual que muchos niños que sueñan ganarse la vida dando patadas a un balón.

Desde muy pequeño tenía claro que el esfuerzo, el trabajo duro o la constancia eran elementos que no le debían de abandonar a lo largo de toda su carrera y que tenía que potenciarlos para consagrarse como una estrella.

Gracias a estas premisas el jugador portugués es a día de hoy uno de los mejores jugadores del mundo gracias a su velocidad, su regate es, sus asistencias con sus goles. En definitiva, debido a su determinación e intensidad en el juego del equipo. Él ya ha ganado muchos de los títulos a nivel de clubes así como algunos de los más prestigiosos a nivel individual.

Prueba de ello es que cuando estaba en el Manchester United ya consiguió hacerse con el balón de oro. Un premio que se le otorga al mejor jugador de la temporada, al mejor del año. Él no consiguió hace varios años pero ha visto como Lionel Messi le adelantado por la izquierda logrando la friolera de cuatro distintivos como mejor jugador del mundo.

Sin embargo, a día de hoy y con el argentino lesionado, cristiano Ronaldo se postula como uno de los grandes favoritos a hacerse con dicho galardón. Esta campaña parece que su duelo particular será con el francés Frank Ribery. El jugador luso ha sido mucho más regular y determinante en su equipo que el astro francés, sin embargo, los títulos obtenidos por el jugador galo así como el hecho de que es el jugador más importante del mejor club europeo de la temporada pasada generan ciertas dudas en torno a que el portugués se vuelva a coronar en lo más alto del Olimpo futbolístico.

Cristiano se planta ante el francés tras dejar en la cuneta a otro de sus rivales, Ibrahimovic. En su enfrentamiento personal en la repesca del mundial, Ronaldo puso en la ida en ventaja a los portugueses con un gol y en la vuelta en Suecia decanto la balanza del lado del país ibérico en un duelo frenético con el sueco donde el luso salió vencedor con tres dianas frente a las dos conseguidas por su rival.

Tras sacar el billete que da acceso al mundial, Cristiano Ronaldo se ha convertido en uno de los jugadores del año, en el jugador que esta campaña ha tenido más focos encima. El portugués ha sabido entender que sus celebraciones chulescas y su forma de ser ante los medios de comunicación donde en ocasiones presentaba una figura arrogante le restaban importancia y votos en el planeta fútbol, además tras dar un giro a su comportamiento ha comprendido que en el Real Madrid él es el nuevo emblema del club. Por ello, se ha erigido en el nuevo líder de un equipo que empieza y termina en el al igual que en la selección de su país donde ha comprendido que tiene que ser el líder al que sigan sus compañeros. También ha influido debate las declaraciones del presidente de la FIFA Joseph Blatter el cual comentó que su favorito era Leo Messi y comparó a Ronaldo con un comandante por su forma de jugar. Todos estos elementos han avivado la llama del debate sobre quién debe ser coronado como mejor jugador del planeta y en la actualidad el jugador portugués está comiéndole día a día portadas y comentarios a Frank Ribery. Cristiano Ronaldo ha vuelto a ganarse por derecho propio el ser bañado en oro, sin embargo, habrá que ver si pesa más los éxitos conseguidos con la determinación en el juego. En unas semanas sabremos si el alzamiento al trono del jugador portugués es una realidad o sólo es una visión ilusionista del mundo del futbol.

En ese momento conoceremos si el Cristiano que de niño soñaba con ser un gran jugador pateando el balón, su compañero fiel, por las calles de Funchal para después hacerlo en Lisboa, Manchester, Madrid o el resto del mundo sigue jugando con un balón de trapo o si por el contrario ese balón se ha vuelto a convertirse en oro.