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La temporada 2016-17 no ha sido una gran campaña para el Barcelona. El conjunto catalán no sólo ganó únicamente la Copa del Rey sino que tuvo que ver cómo su eterno rival, el Real Madrid,) se hacía con la Liga Española y la Champions League. Además, el pasado curso Luis Enrique anunció su marcha al frente del equipo este verano y en el entramado táctico la salida de Dani Alves fue suplida por un parche temporal como el centrocampista Sergi Roberto que rindió a gran nivel a pesar de no ser su posición habitual.
En relación a esta última situación, el equipo azulgrana ha dedicado gran parte de los últimos meses a rastrear el mercado en busca de un especialista puro para el flanco derecho de su defensa. De esta forma, la dirección deportiva ha seguido a futbolistas como el ex sevillista Mariano, el valencianista Joao Canceló o, recientemente, el gunner Héctor Bellerín. Éste último era el que más gustaba para reforzar dicha posición debido a su enorme talento y proyección así como, sobre todo, por su pasado barcelonista al ser un talento formado inicialmente en la Masía.
Sin embargo, la negativa de Arsene Wenger de desprenderse del jugador llevó a la dirección deportiva del equipo a lanzarse en busca de otras opciones y, en ese momento, apareció una nueva alternativa inesperada en la figura de un joven futbolista que era el que más se asemejaba a Dani Alves, salió a escena el lateral derecho del Benfica Nélson Semedo. El jugador portugués se convirtió en el principal candidato al puesto al ser un defensa joven (23 años) que destaca tácticamente ser un defensa rápido capaz de subir y bajar la banda en muy poco tiempo, con una constitución física fuerte y una orientación táctica ofensiva que le permite ayudar en los últimos metros al finalizar es el equipo así como un gran disparo desde fuera del área.
Además, otra de las razones de que Nelson Semedo haya sido el elegido para ser el nuevo “2” azulgrana ha sido sus semejanzas, salvando las distancias, con Dani Alves a la hora de abrir el campo o ganar la línea de fondo del ataque para poner centros a sus compañeros. Una cualidad esta última en la que el defensa brasileño es un auténtico maestro.
De esta manera, con la incorporación del defensa portugués, el Barcelona espera haber encontrado al fin un lateral derecho capaz de marcar una época en el conjunto catalán como ya hicieran futbolistas como el propio Dani Alves, el holandés Michael Reiziger o el español Chapí Ferrer. Todos ellos jugadores que se hicieron durante largo tiempo con el “2” del equipo como prueban los ocho años que defendió esa posición Alves, los siete que lo hizo Reiziger o los seis que ocupó ese lugar en el campo Ferrer.
Por lo tanto, si atendemos a la larga estancia de jugadores en dicha posición desde 1990 cuando el Chapí Ferrer cogió el testigo de López Rekarte hasta 2016 cuando Alves decidió recalar en la Juventus (con la excepción de Zambrotta y Belleti que estuvieron menos de tres temporadas como dueños del “2” ), el puesto de lateral derecho ha sido uno de los más consolidados en el club catalán.
Una posición la de dueño del flanco derecho de la defensa en la que los jugadores que han sido ubicados en dicha zona han destacado por su enorme compromiso, aporte defensivo y ofensivo o su despliegue físico. Características que posee Nélson Semedo para poder hacer que la sombra de Dani Alves, la cual sigue planeando en esa zona del Camp Nou, desaparezca de una vez por todas de Can Barça con la aportación de este defensa portugués que aspira a marcar una época como “2” azulgrana emulando a los Ferrer, Reiziger o el propio Alves.
