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Apareció la segunda jornada del grupo D y todos estábamos pendientes de como reaccionarían Francia, tras su partido correcto y sin arriesgar ante Inglaterra, y Ucrania, tras dar la sorpresa ante Suecia, que se enfrentaban en ese segundo choque.
El partido tuvo que pararse al poco de comenzar debido a la lluvia y no se reanudo hasta una hora después lo que provoco que la primera parte fuese un partido descafeinado con poco futbol de ambas selecciones.
No ocurriría lo mismo en la segunda parte cuando el combinado galo salió a hacer lo que sabe, jugar al fútbol. En esta ocasión el director de la orquesta fue una de las sorpresas del año, Cabaye que con una mezcla de puño de hierro y guante de seda lidero a los blues a la victoria acompañado de la artillería de Blanc arriba en hombres como Benzema, Ribery o Nasri lograron derribar a una tímida Ucrania gracias a los goles de Cabaye y Menez.
Con este triunfo, la gran tapada se ha quitado la mascara y comienza a crear un miedo en los rivales como hace tiempo que no conseguían ya que esa última sensación se perdió en la Eurocopa del año 2000 cuando un tal Zinedine Zidane era el exponente del fútbol francés. Con esta sensaciones Francia entra en el ramillete de las selecciones que optan al título.
En el otro encuentro ingleses y suecos jugaron conscientes de que sólo la victoria podía ahuyentar los fantasmas de su mala situación. La Inglaterra de Hodgson parece haber recobrado el optimismo que muy pocos tenían ante una selección que vive momentos convulsos.
Para remediarlo se apoyaron en su juego de contrataques rápidos y balones al punta Carroll que le permitieron entrar al túnel de vestuarios con ventaja. Suecia se mantenía agazapada con su estrella Ibrahimovic al frente y herida de muerte salió a por el partido para no decir adiós a la Euro.
Melberg fue la imagen de ese cambio con dos goles en sendos remates de córner que ponían a Suecia por delante en un partido roto de no volvería a tener tranquilidad. Hodgson viendo que la victoria se le iba metió en el campo más velocidad con Theo Walcott que consiguió el empate ayudado por Isakson y con los dos heridos buscando la salvación llegó Welbeck que se inventó una genialidad para que Inglaterra viva y para que Suecia e Ibrahimovic fuesen decapitados y vayan de la Euro antes de tiempo acabando con la ultima gran oportunidad de hacer algo importante con su selección en el viejo continente.
