31 de enero de 2010. El “Boom Guerrero” que había estallado en Santander en la persona de Sergio Canales se extiende por toda la geografía española tras la última actuación del 27 del Racing de Santander en el choque ante el Sevilla. Dicha actuación ha revolucionado el fútbol nacional donde los grandes clubes españoles y extranjeros entran en una carrera por su fichaje.
En dicha pugna por hacerse con sus servicios, el Real Madrid fue el más listo de todos a la hora de hacerse con los servicios de la joya salida de La Albericia.
A pesar de los inicios prometedores, el jugador cántabro tuvo una carrera de blanco similar al “efecto champán”. Canales entró rápidamente en la dinámica del equipo donde cuajó grandes actuaciones pero, las lesiones acabaron prematuramente con su trayectoria en el club de Chamartín.
Aún así, el elevado talento del santanderino le permitió rendir a gran nivel en el Valencia y la Real Sociedad (donde sigue militando).
24 de noviembre de 2014. El diario Marca anuncia que el Madrid se ha hecho con los servicios de otra joya española que también portaba el 27 a la espalda. Marco Asensio, jugador del Mallorca, es el futbolista contratado a cambio de 3,5 millones de euros.
El club blanco ha vuelto a repetir la jugada realizada con el cántabro adelantándose a los grandes clubes españoles y europeos. Un fichaje que como afirma Enrique Ortego “es un caso como el de Canales, si te funciona te lo que tras y si no lo cedes y lo vas controlando”.
El cántabro y el mallorquín tienen en común que ambos han sido joyas mediáticas fichadas por el Real Madrid, ambos portaban el 27 y ambos desempeñaban la función de mediapunta creativo.
En cuanto a las diferencias entre ambos está el hecho de que mientras Canales de su futbolista dedicado a la construcción del juego, Asensio es un jugador que disfruta en la definición por lo que su radio de acción también puede ser la banda.
Sin embargo, la gran diferencia entre ambos es que el paso del cántabro por el Real Madrid ya es conocido mientras que la trayectoria como blanco del balear aún es una incógnita. En este sentido, puede resultar clave en el paso de ambos por la Casa Blanca la forma de actuar de los dirigentes madridistas. Así, mientras que con Canales no hubo una fase de adaptación previa al equipo, con Asensio se tiene decidido que, a priori, pase una temporada adaptándose a la primera división en otro equipo antes de dar el salto a Concha Espina.
Con el fichaje del balear, el Real Madrid espera aprender de los errores y que a la segunda vaya la vencida y se acierte con la contratación del nuevo 27. La afirmación “segundas partes nunca fueron buenas” es el handicap a superar por el talento mallorquín (tras superar la fase de adaptación a primera) el día que se gane una oportunidad para vestir la casaca blanca.